"Ella era hermosa,
Me sonrió,
Y sus ojos me mostraron mi alma.
Esa que creía que había perdido".
Ubud, Bali, Indonesia 2023.-
Empezaré desde lo mas bien practico.
Llegamos a Ubud en un tráfico que es un desorden funcional, y que solo ellos entienden.
Algo así como Argentina, donde los semáforos no dictan absolutamente nada, sino que más bien cada quien elige su turno para avanzar. Pero desde ahí ya me sorprendió que en Ubud la gente no se estresa, ni se enoja. Cada quien avanza a su ritmo.
Prepárate para un tráfico infernal que paradójicamente pareciera no alterar la emoción de los conductores.
Entre scooters (que ellos mismos describen como "mosquitos"), y vehículos viejos llegan a su destino, sus villas, donde habita toda la comunidad (o a recoger a más de un turista curioso con ganas de impregnarse de las atracciones de Ubud.
Nos recibió uno de los mejores hoteles que he visitado en mi vida. Realmente lo recomiendo. Como los gringos dirían, "it took my breath away"; entre naturaleza y escultura estaba nuestra villa privada en Arma Museum & Resort. Aquí encontramos toda la tradición Balinesa en un solo lugar flores, riachuelos y estatuas de dioses, escoltadas por ardillas, lagartos y ranitas, así como un museo de pintura tradicional y moderna.
Primera atracción:
Legong Dance Show en Ubud Palace
"Olvídate de la comodidad, y acércate a un recibimiento de los dioses".
Este espectáculo fue el recibimiento más adecuado a lo que más tarde me enamoraría sin esperarlo.
Primero la bendición de un sacerdote Hindú a los instrumentos y quienes harían música a través de ellos, y luego, la magia...
Una música de algo así como xilófonos para comenzar a actuar la historia de dos hermanos que eran reyes pero querían conquistar el cielo. Por ello los dioses enviaron a una de las mujeres más bellas a distraerlos.
Los hermanos terminan peleando entre ellos y así los dioses lograron conservar el balance entre su territorio y la tierra.
La forma de bailar y cómo utilizan el cuerpo en general y específicamente los dedos es inigualable.
Los ojos de los bailarines son el punto de atención, y yo no pude quitar los míos de ellos.
En el templo la gente se sienta en el piso, el el turista, por muy "turista" que sea debe hacer lo mismo. No hay excepción, así que después de una hora y media de show el cuerpo poco acostumbrado a ello te pide a gritos volver a la comodidad de un cojín siquiera. Me sentí poco voluntariosa en comparación con lo que ellos están acostumbrados, sin embargo, disfruté cada segundo de la historia contada a través de música y danza.
Templo Puseh Batuan
El templo de Batuan es un templo tradicional Hindú construido en el estilo clásico del templo balinés. Se menciona en registros históricos que se remontan a 1000 años.
Es uno de los templos más populares y hermosos, que forma parte de tres templos principales en un pueblo llamado Tri Kahyangan, y está diseñado con arquitectura balinesa con puertas divididas, guardianes de piedra, santuarios con techo de paja y tallas detalladas.
El Templo de Batuan, conocido localmente como Pura Puseh Batuan, es un hito central en el pueblo homónimo de Batuan, conocido por sus artes y pinturas tradicionales balinesas. Uno de los tres templos del pueblo dedicados a los dioses de la trinidad hindú.
Este templo, como todos los que visité en Ubud, tiene 3 áreas principales; Nista Mandala (área) Madya Mandala (Middle area) and Utama Mandala (Main temple area).
Terrazas de Arroz-Tegallalang:
Patrimonio de la Humanidad, relata cómo los indonesios plantaban y siguiendo plantando arroz y los regadíos para mantenerlos. Puedes tomarte fotos en los típicos columpios, admirados por muchos en las redes sociales en estos días. La verdad es que las vistas son maravillosas; todo verde y los diferentes tamaños de las plantas de arroz, según su nivel de desarrollo. Todo muy organizado. Ahí aprendí que el arroz rojo es el más saludable, ya que contiene zinc en altas cantidades, así como hierro, potasio y calcio. Es también menos dulce, y por ende, menos sabroso.
Cascada Tegenungan
Bali, dado sus condiciones naturales y clima tropical esta situado entre maravillosas cascadas, imponente vegetación y animales de todos los colores. Para quienes me conocen, saben que es una de las cosas que más amo.
La cascada se ha convertido en una atracción turística, por ende estaba un poco atochada de gente. No nos tomamos mucho tiempo ahí, sin embargo, no deja de ser un lugar hermoso que vale la pena visitar.
***Comida típica:
*Nuestro guía, Krisna, era muy amigable. Yo quería probar comida lo mas tradicional posible, y nos llevó a un pequeño negocio donde una señora vendía lo que ellos llaman Babi Guling...Cerdo, vegetales y muchooo picante.
Todo por menos de US$2.
Después de esa experiencia decidí que en todas las comidas probaría platos típicos de la gastronomía Balinesa. Siempre son basados en proteína de cerdo o pollo, acompañados con arroz. Muy sabrosos.
Degustación de Café Luwak:
Kopi Luwak es el café más caro del mundo. El factor principal de su alto precio es el método poco común de producir este tipo de café. Este café se produce a partir de los granos de café que han sido digeridos por cierto animal parecido a un gato indonesio llamado entonces civeta de palma o también gato de algalia. Esta es la razón por la que al kopi luwak a menudo se le llama café “caca de gato”.
Los granos de café son en realidad semillas que se encuentran en el hueso de los frutos del tamaño de una cereza en la planta del café. La eliminación de estas semillas en la preparación del café se puede realizar mediante fermentación. A lo largo de los años, los humanos han ideado varias formas de sintetizar ese proceso de fermentación. Pero la fermentación también ocurre naturalmente en la naturaleza a través del tracto digestivo de un animal. Aquí en el cafetal, el gato algalia come las bayas más maduras de una planta de café y, mediante el proceso de digestión, la semilla se separa del fruto y se fermenta. Después de unas 24 horas, el gato expulsará las semillas de forma natural y listo… comienza la magia en el proceso de preparación del café.
En lo personal, como me considero admiradora de
la naturaleza, y trato de ser cada vez más consciente del maltrato animal, no me sentí muy cómoda al no saber donde estaban los animales (gato indonesio), como los conservan y el hecho de que se hace negocio a través de su alimentación. Igualmente disfruté de la experiencia y todas las opciones de café disponibles, pero no sé si sea altamente ético en cuanto a conservación animal.
Sacred Monkey Forest Sanctuary:
Reserva natural protegida, es el hogar de más de mil Macacos Balineses de cola larga, que entre ellos se han organizado en 3 comunidades, que según nos dijeron, no se llevan bien entre ellos. Cada una habita en una parte especial del bosque, son muy territoriales, y defienden su territorio de los otros monos.
Este es su hogar, y ellos lo saben.
Los monitos juegan, comen, y atienden a sus "tareas diarias" sin poner la más mínima atención a los turistas.
Aquí mandan ellos, y no se te ocurra molestarlos, "ni siquiera para una selfie", porque no tienen miedo de atacarte.
Ésta fue una de mis experiencias favoritas, ya que pude ver a los monos de cerca, incluso los bebés abrazados a sus madres, quienes los transportan colgando de un lado a otro.
Son los amos y señores del lugar, juegan y viven libremente en el enorme parque de 12,5 hectáreas.
Cabe señalar que, tanto el lugar, como los monos, son sagrados en la cultura Hinduista, y que el macaco balinés de cola larga es quien acompaña a Barong, quien es una criatura de la mitología Balinesa en Indonesia, rey de los espíritus, de alma bondadosa, amigable y enemigo de Rangda (uno de los espíritus malignos).
Templo Tirta Empul y recorrido por la ciudad:
A las 6:45AM nos pasó a buscar nuestro guía, Komang, para disfrutar de esta maravillosa experiencia de limpieza espiritual el el Templo Tirta Empul, que es común en la religión Hindú, donde basicamente vas pasando por distintas caídas de agua (12) y cada una de ellas limpia una parte específica de la mente, cuerpo y alma. Así como tu karma y el de quienes son parte de tu familia.
El agua de manantial que llega al templo es considerada una fuente de purificación, limpieza y reinicio, y los devotos llevan a cabo rituales donde se sumergen en las aguas sagradas, para reinventarse y limpirar, su cuerpo, mente y espíritu.
Ciertamente, incluso para el más incrédulo, tiene una mística importante y la energía del lugar es mágica. Luego del baño te sientes renovado y en una extraña paz interior.
Al volver a nuestro hotel recorrimos el museo de arte moderno y antiguo, donde las pinturas reflejan la cultura Balinesa, la naturaleza, los dioses y la religión.
Caminar por la ciudad, entre turistas, scooter, templos, perros en la calle, que si bien son parte de alguna familia, son también libres y vuelven a su villa por la noche, al calor de hogar que protegen sagradamente. Los aromas, y muy importante, la seguridad, porque aquí el robo o la delincuencia no existen, ya que deben ser su mejor versión para proteger su karma.
Mount Batur:
2:20AM
Nos levantamos muy temprano (en medio de la noche, en realidad), para ver el amanecer en el Monte Batur, que es un volcán activo ubicado en el centro de dos calderas concéntricas al noroeste del Monte Agung en la isla de Bali, Indonesia.
Según mi reloj, caminamos aproximadamente 3 kilómetros de subida, y yo, que creo ser más o menos atlética, estaba exhausta, pero al mismo tiempo intrigada y feliz.
Fue una experiencia divertida: caminar con linternas en el medio del bosque de noche, escuchar el silencio, y desafiar tu cuerpo y estado físico para llegar a la meta.
Después de 3 horas de caminata llegamos a la cima y podíamos ver cómo se excavabas un poco el vapor de agua hervía los huevos que te daban para el desayuno. La naturaleza no deja de sorprenderte.
Finalmente, aproximádamente a las 6AM el cielo deja su color oscuro, y se vuelve rojo y naranjo. Sale el imponente sol desde las montañas, para darle la oportunidad a un nuevo día.
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Ubud, en Bali.
Te pone los pies en la tierra y el alma al cielo.
Te conecta con la gente. Y con lo que ellos llaman tu Dharma.
Me reconecto con lo que creía perdido, los sentimientos más crudos, sin filtro.
La bondad que sentía de niña que creí que había expirado. La compasión por el desconocido, que de alguna manera es también mi alma.
Nunca habría pensado que un lugar de tendencia iba a ser tan significativo. Tiendo a juzgar, cómo todos, pero no me quede con la foto para instagram, acá el aroma es distinto, y estas personas son muy sabias. Ellos no entienden el sentido de ¨la pose¨de instagram, porque en realidad a quien le importa instagram más que a los egos heridos.
La espiritualidad de estas personas me devolvió algo que creía perdido. Me conectó. Y me desconectó de lo que en realidad no es importante.
Recuerdo a una madre y su hija en una de las calles de Ubud, que me regaló una sonrisa del corazón, una pulsera, y yo le doy las gracias porque me reconectó con la compasión y hermandad por el que es muy diferente tal vez, pero igual a mí. Esa pulsera es el símbolo de mi gratitud por ser quien soy, y al mismo tiempo de humildad para recordar que debo ser agradecida.
Ella era hermosa y su cara salía de la multitud, única, ella era yo o lo que yo había perdido.
Me recordó el despojarte, y me recordó lo que llena mi alma.
Amo la filosofía del Hinduismo.
No pensé que me haría tanto sentido y se parecería tanto a lo que desde el alma también creo cierto.
En Ubud los humanos hacen el bien en favor de su alma, para que ésta reciba bien karma. La gente es buena. Conocen su misión, que es hacer el bien, pero desde la necesidad del alma.
Es una cultura de sabiduría.
Entienden y respetan desde sus almas ancestrales.
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